Carmen Bordes
Recuento de trayectoria
Recuento de trayectoriaCarmen Bordes es una artista tapatía que durante más de 40 años se ha dedicado a la creación dentro del rubro de las artes plásticas. Ha destacado por sus conocimientos en la pintura y el grabado generando obras que son parte de la memoria colectiva de toda una generación de artistas y ha creado una escuela de grabado que actualmente instruye e impulsa a los jóvenes artistas dentro de las artes gráficas. En esta ocasión la artista le abre las puertas de su taller al equipo de Amapola Cultura para compartir un poco acerca de su trayectoria y carrera como artista. Carmen Bordes pertenece a una generación de artistas jaliscienses que propiciaron gran movimiento e influencia en el ámbito cultural de las décadas de los 70´s y principios de los 80´s entre los que se puede hacer mención a nombres como el de Martha Pacheco, Salvador Rodríguez, Christina Cárdenas, Irma Naranjo, Jorge Monroy, Javier Campos Cabello y el Kraepelin. El primer acercamiento que vivió Carmen dentro del mundo de las artes sucedió de manera fortuita y por azares del destino, justo cuando ella se encontraba en aquella época de juventud en la que se debe de elegir una carrera de estudios: Un día cualquiera Carmen se encontraba en búsqueda de un lugar y sin querer entró a las instalaciones de Artes Plásticas de la Universidad de Guadalajara. Carmen nos comenta que en el momento en el que vió el espacio en el que se encontraban los estudiantes de artes supo que ella quería estar ahí y así fue como unos meses más tarde ingresó a la escuela. Sin embargo al poco tiempo la artista se cambió de carrera para estudiar dibujo publicitario, decisión que tomó debido a las influencias familiares que le incitaron a buscar otras opciones para su estudio y su medio de vida futura. Después de terminada su carrera Carmen viajó al D.F. en una búsqueda por ingresar a la escuela de La Esmeralda. Al momento de que los planes no sucedieron como lo previsto Carmen buscó un trabajo y permaneció en él durante dos años, tiempo suficiente para que ella decidiera que su profesión se encontraba en las artes. Así, dos años después de su partida, Carmen regresó a Guadalajara para concluir su carrera en artes plásticas. Ocho años de estudio fue lo que la artista sumó al momento de salir de la escuela, siendo este uno de los motivos por los que esta etapa resulta una gran influencia para su formación. Carmen nos platica de manera muy jovial y entusiasta el contexto artístico en el que ella se formó dentro de la escuela, reconociendo esto como otro punto clave que sustentó sus raíces profesionales, pues ella vivió en una época en la que artistas con gran experiencia y trayectoria fueron parte del cuerpo docente de la Universidad de Guadalajara, donde hace mención a personajes como Francisco Rodríguez “Caracalla”, Tom Coffin, Alfonso de Lara Gallardo, Jorge Martínez. Maestros que, según comenta, cobijaron a la generación y la apoyaron incluso después de que habían salido de la escuela, buscando ante todo ofrecer a los jóvenes una plataforma sobre la cual pudiera despegar su trabajo artístico. Al finalizar la escuela la historia de Carmen toma un rumbo más lejano cuando se entera de un curso de grabado que estaba próximo a ofrecerse en un sitio llamado Taller 17 en París, lugar reconocido por los grandes nombres artísticos que a través del tiempo han pasado por ahí. Así fue como la artista decidió tomar el curso, ahorró algo de dinero y se fue al viejo mundo pensando que su estadía duraría el mes que duraba el curso, sin embargo las circunstancias le hicieron algunas jugarretas y aquel mes se extendió a tres años. Durante ese tiempo la artista estuvo trabajando para ese taller de grabado y posteriormente también se involucró con otros espacios. Carmen rememora tal estadía como una época rica en experiencias, donde la necesidad se volvió la más grande de sus virtudes. A su regreso a Guadalajara comenzó a realizar retrato y continuó con el grabado, fue así como poco a poco su trabajo se fue posicionando. Hoy en día es reconocida por sus amplios conocimientos dentro del arte de la impresión dominando muchos rincones de sus posibilidades (aguatinta, aguafuerte, buril, barniz blando, etc). En sus pinturas se puede encontrar como constante el reflejo de aquellos seres y cosas que nos rodean, el uso de símbolos y objetos cotidianos así como su amplia exploración en el género retratístico. A través del tiempo y de toda su obra Carmen ha trabajado por un lado la abstracción y por otro el surrealismo, creando en veces imágenes figurativas que coquetean de alguna manera con la presencia de metáforas o símbolos que se apropian de la pieza de manera muy sutil.
Hoy en día Carmen trabaja en su taller, creando obra, por un lado con el grabado y por el otro con la pintura, otra de sus actividades es la de enseñar técnicas de grabado dos veces por semana a las nuevas generaciones de jóvenes con el fin de ofrecer aquella plataforma que alguna vez sus maestros le ofrecieron a ella. |
Pingback: 5to Festival del Pequeño Formato // Casa Rombo
Pingback: Veinte Grabando // Exposición colectiva