Posts Tagged 'cuento'

Visitaciones // Pregúntale al Polvo
Advertencia al lector: favor de amenizar la lectura con “What a wonderful world” de Louis Armstrong. Cierta mujer cosmopolita se ducha mientras un hombre espera acostado en aquella cama de sábanas también cosmopolitas. La mujer sale del cuarto de

Visitaciones // Pregúntale al Polvo
Advertencia al lector: favor de amenizar la lectura con “What a wonderful world” de Louis Armstrong. Cierta mujer cosmopolita se ducha mientras un hombre espera acostado en aquella cama de sábanas también cosmopolitas. La mujer sale del cuarto de

Domingo // Pregúntale al Polvo
Los domingos la gente se quiere más. Uno se acelera y comete una sarta de imprudencias como pensar en voz alta, o no pensar que se habla mientras se piensa, o no hablar cuando se tiene que hablar, porque

Domingo // Pregúntale al Polvo
Los domingos la gente se quiere más. Uno se acelera y comete una sarta de imprudencias como pensar en voz alta, o no pensar que se habla mientras se piensa, o no hablar cuando se tiene que hablar, porque

Ajayu // Pregúntale al Polvo
I Ella bebía Cruz de Malta en su matera de calabaza. Lo apiñonado de su piel combinaba con la intensidad del verano en aquella ciudad boliviana. Yo leía la poesía de Adela Zamudio, ella miraba a la calle. Ambos

Ajayu // Pregúntale al Polvo
I Ella bebía Cruz de Malta en su matera de calabaza. Lo apiñonado de su piel combinaba con la intensidad del verano en aquella ciudad boliviana. Yo leía la poesía de Adela Zamudio, ella miraba a la calle. Ambos

La cuota o Santa Tere // De memorias intravenosas
Hacia Santa Tere, en el cruce de Garibaldi y Andrés Terán, pero a veces en el de Juan Álvarez y Pedro Buzeta, se detienen por intermitencias tres taxis. Uno lo conduce Pedro, quien no come chile, se pone la

La cuota o Santa Tere // De memorias intravenosas
Hacia Santa Tere, en el cruce de Garibaldi y Andrés Terán, pero a veces en el de Juan Álvarez y Pedro Buzeta, se detienen por intermitencias tres taxis. Uno lo conduce Pedro, quien no come chile, se pone la

Situaciones // Pregúntale al Polvo
J y yo caminamos bajo el puente que cruza Main Street. El invierno plagó la ciudad de un color enfermizo, y el vaho de nuestros rezos parece congelarse. En el imaginario puedo contemplar a la multitud ausente, y

Situaciones // Pregúntale al Polvo
J y yo caminamos bajo el puente que cruza Main Street. El invierno plagó la ciudad de un color enfermizo, y el vaho de nuestros rezos parece congelarse. En el imaginario puedo contemplar a la multitud ausente, y

Paulo // Pregúntale al Polvo
Él, acostado en la cama número 117, obedece a la noche y se entrega en su totalidad. Él flaquea ante ella, pues siempre la amó. Paulo, durante sus años lúcidos, siempre amó a la noche. La luna se convirtió

Paulo // Pregúntale al Polvo
Él, acostado en la cama número 117, obedece a la noche y se entrega en su totalidad. Él flaquea ante ella, pues siempre la amó. Paulo, durante sus años lúcidos, siempre amó a la noche. La luna se convirtió

De memorias intravenosas // Querida Guajaca
Guajaca: así se enuncia la gloria. Llegué a esta ciudad huyendo de mí. Vine en blanco: sin pasado: anónimo. Me recibió un cielo verde, noble, manso, inagotable. La tierra: su color de trabajo rojo, su textura divina, su

De memorias intravenosas // Querida Guajaca
Guajaca: así se enuncia la gloria. Llegué a esta ciudad huyendo de mí. Vine en blanco: sin pasado: anónimo. Me recibió un cielo verde, noble, manso, inagotable. La tierra: su color de trabajo rojo, su textura divina, su

De memorias intravenosas // La miseria que va
Tiemblo de recordar: era el tiempo de la miseria. Los pesos alcanzaban como centavos y las calles se llenaban de trotamundos bohemios: incansables almas afligidas. Hacíamos, uno por uno, el tránsito del tabaco americano al nacional y del whisky

De memorias intravenosas // La miseria que va
Tiemblo de recordar: era el tiempo de la miseria. Los pesos alcanzaban como centavos y las calles se llenaban de trotamundos bohemios: incansables almas afligidas. Hacíamos, uno por uno, el tránsito del tabaco americano al nacional y del whisky

Universo // Pregúntale al Polvo
Llegamos al hotel de paso que está sobre la carretera deshabitada. Alquilamos la última habitación; al menos eso nos dijo el portero desdentado. Estás exhausta, lo percibo en tu cabello despeinado. La madera de las escaleras cruje al subirlas

Universo // Pregúntale al Polvo
Llegamos al hotel de paso que está sobre la carretera deshabitada. Alquilamos la última habitación; al menos eso nos dijo el portero desdentado. Estás exhausta, lo percibo en tu cabello despeinado. La madera de las escaleras cruje al subirlas

“Despertares” de Beatricia Braque
Por Beatricia Braque Me levanté de la cama. Caminé hacia el baño para lavarme los dientes y desperté. Seguía recostada en mi cama, así que me levanté y caminé hacia el baño para lavarme los dientes. Después de eso

“Despertares” de Beatricia Braque
Por Beatricia Braque Me levanté de la cama. Caminé hacia el baño para lavarme los dientes y desperté. Seguía recostada en mi cama, así que me levanté y caminé hacia el baño para lavarme los dientes. Después de eso

La ciudad de la eterna pausa
Por Beatricia Braque – Eh! qu’aimes-tu donc, extraordinaire étranger? – J’aime les nuages… les nuages qui passent… là-bas… là-bas… les merveilleux nuages! -Baudelaire, L’étranger Abrí las manos para tocar la soledad, cerré los ojos para despedirme de los

La ciudad de la eterna pausa
Por Beatricia Braque – Eh! qu’aimes-tu donc, extraordinaire étranger? – J’aime les nuages… les nuages qui passent… là-bas… là-bas… les merveilleux nuages! -Baudelaire, L’étranger Abrí las manos para tocar la soledad, cerré los ojos para despedirme de los